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La audacia del drifting no es para cualquiera, no es “solplar y hacer botella”.
Pero para los especialistas es un arte, es derrapar pero siempre llevando el volante bajo control. Se trata de recorrer ‘de lado’ la mayor distancia posible. Y de eso sabe y mucho Johan Schwartz y su BMW M5.
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Ambos batieron un récord mundial por lejos y se inscribieron en las páginas del codiciado Libro Guinness de los Records. ¿la proeza? una derrapada de nada menos que 82 kilómetros de longitud.
La prueba fue hace días en una pista circular y mojada de Carolina del Sur (Estados Unidos). Allí Schwartz aprovechó a fondo los 560 caballos del M5 para batir la marca conseguida por el italiano Mauro Carlo, quien había recorrido una distancia de 2,3 kilómetros con un Mercedes C63 AMG aunque, hay que reconocer, éste lo hizo en seco.
En cambio la pista circular en la que “patinó” Schwartz con el BMW M5 había sido regada para la ocasión, pero tampoco se trata de quitarle méritos a un hombre que completó nada menos que 322 vueltas al circuito… ¿alguien lo superará?
