El Rastrojero se ha convertido con los años en uno de los productos emblemáticos que dejó nuestra industria automotriz. Desarrollado por IAME, fue concebido casi por casualidad: tras una mala compra del Estado Argentina de 2500 tractores a la firma norteamericana Empire. Los mismos habían sido adquiridos para tareas rurales, pero su concepción no era propicia para tal uso.
Con el objetivo de darles utilidad, Industrias Aeronáuticas y Mecánicas del Estado realizó varios prototipos utilizando partes de estos tractores. Una vez concebido el diseño, se conformó una carrocería bastante simple, con los elementos disponibles en aquel momento. A este Rastrojero mucho lo apodan como «Gardelito», y es el que presenta los guardabarros que no están integrados a la carrocería.
El nombre viene de la palabra «Rastrojo», que no es más que los residuos que quedan una vez realizada la cosecha en el campo. El Rastrojero fue creado inicialmente para tal fin. Para las 2500 primeras unidades se emplearon los motores Willys nafteros de los tractores Empire.
Rastrojero: el verdadero utilitario argentino
Debido a un éxito prematuro, el stock de motores se acabó, por lo que IAME debió buscar nuevas alternativas. La firma llegó a un acuerdo con la alemana Borgward, que comenzó a proveerle un por entonces revolucionario motor Diésel, que rendía tan solo 44 CV.
Por entonces no había vehículos comerciales compactos con motor Diesel en nuestro mercado: los camiones eran mayormente nafteros y V8, al igual que las camionetas. El éxito del Rastrojero se debió principalmente a la utilización de esta motorización, ya que el Gas Oil por entonces era mucho más barato que la nafta.
La primera generación del Rastrojero se produjo hasta 1968. Allí entró en acción la segunda generación del Rastrojero, conocida como «Caburé». El mismo contaba con una carrocería completamente nueva, mucho más moderna, que disponía incluso de mayor espacio interior. A su vez con el paso del tiempo el Rastrojero ganaba en confiabilidad.
El nuevo Rastrojero estaba impulsado por un motor Indenor Diesel, similar a los que equipaban los Peugeot de aquellos años. Este motor era una evolución del Borgward, pero con los que ofrecía prestaciones superiores.
El Fin del Rastrojero Diesel
Paralelamente, ya bajo la denominación IME, se desarrollaron nuevas alternativas para el Rastrojero. Entre ellas un camión frontal, o mismo el Rastrojero Conosur, un sedán de cuatro puertas, destinado para su uso como taxi. Asimismo también existieron variantes del Rastrojero con doble cabina: una gama por revolucionaria.
La producción del Rastrojero en manos del estado prosiguió hasta 1979, cuando finalmente se decretó el cese se producción. En una etapa particular la firma Massey Ferguson produjo hacia finales de la década del ochenta el Ranquel, una variante que tomaba el Rastrojero como base, con motor evolucionado y otras mejoras, aunque estuvo en producción durante unos pocos años.
En la actualidad es muy difícil encontrar un Rastrojero en condiciones de exposición, ya que siempre fue un vehículo destinado al uso intensivo. De todas formas, siempre existen excepciones a la regla, y en este caso no serán para nada económicas: pueden costar desde 4 mil dólares en adelante.