Toyota anunció el lanzamiento de su primer vehículo eléctrico equipado con un sistema avanzado de conducción autónoma para el mercado chino en 2025. Este modelo será un SUV denominado Bozhi 3X y contará con tecnología que permitirá asistencia avanzada en la conducción, tanto para aparcar como para navegar en autopistas y en tráfico urbano. Este desarrollo tiene como objetivo posicionarlo como líder en tecnología de conducción autónoma entre las marcas extranjeras en China.
Una estrategia conjunta de Toyota
La empresa conjunta entre Toyota y la estatal Guangzhou Automobile Group (GAC) pretende recuperar la cuota de mercado del fabricante japonés en China. Esto se realizará mediante la implementación de tecnologías avanzadas en híbridos, baterías y vehículos inteligentes. Durante un evento celebrado en Guangzhou, GAC Toyota delineó varios objetivos de innovación para los próximos años.
El sistema de conducción autónoma del Bozhi 3X está siendo desarrollado en colaboración con Momenta Global, una startup que crea software de conducción autónoma para fabricantes de automóviles como Mercedes-Benz.
Además, Toyota está trabajando con Huawei para integrar el software operativo de vehículos de Huawei en un sedán eléctrico que también se lanzará en China en 2025.
Innovación en baterías para reducir costos
Toyota también tiene planes de introducir una batería de litio de fosfato de hierro entre 2026 y 2027. Esta nueva batería podría reducir el costo de producción de su vehículo eléctrico bZ4X en un 40%, haciendo sus modelos más competitivos en el mercado.
En los primeros cuatro meses de este año, Toyota ocupó el quinto lugar en ventas de automóviles en China, experimentando una disminución del 22% en comparación con el mismo periodo en 2023. Este descenso refleja la necesidad de la empresa de innovar y adaptar su oferta a las demandas del mercado chino, altamente competitivo y en rápida evolución.