La elección de un vehículo no solo depende del diseño, la seguridad o el equipamiento: el consumo de combustible es un factor clave para quienes buscan reducir gastos en un contexto de precios en constante aumento. Entre todos los modelos que se venden en el país, hay un claro ganador en eficiencia: el Toyota Corolla híbrido, que se mantiene como el auto con menor gasto de nafta por kilómetro en Argentina.
Toyota Corolla híbrido: líder en eficiencia
El Corolla híbrido combina un motor naftero 1.8 litros con un sistema eléctrico autorecargable. Esta tecnología le permite alcanzar cifras sorprendentes en ciudad, con un promedio de apenas 4,4 litros cada 100 kilómetros, de acuerdo con los datos oficiales de la marca.
Esta característica lo posiciona como la opción ideal para quienes circulan en entornos urbanos, ya que reduce significativamente los costos de uso y, al mismo tiempo, disminuye las emisiones contaminantes. Además, el mismo sistema está disponible en el Corolla Cross híbrido, su variante SUV, que ofrece rendimientos muy similares.
Los más rendidores entre los autos de nafta
Si bien ningún vehículo convencional logra igualar la eficiencia del Corolla híbrido, hay varios modelos de producción nacional e importada que destacan por su bajo consumo dentro de su categoría:
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Fiat Cronos → consumo mixto de 6 L/100 km, uno de los más competitivos entre los sedanes compactos.
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Chevrolet Onix → promedio de 6,4 L/100 km.
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Volkswagen Polo Track → alrededor de 6,9 L/100 km declarados oficialmente.
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Renault Kwid → en pruebas reales, cerca de 7 L/100 km, favorecido por su bajo peso y motor 1.0 de tres cilindros.
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Toyota Yaris → declara 5,9 L/100 km en ficha técnica, aunque en pruebas de uso real los valores suben a entre 7,8 y 9,3 L/100 km.
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Nissan Versa → sin cifras oficiales detalladas, pero con consumos de 10,4 L/100 km en ciudad y 7,5 L/100 km en ruta.
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Volkswagen Polo 1.6 → en pruebas, mostró 10 L/100 km en ciudad y 7,5 L/100 km a 130 km/h constantes.
Por qué importa la eficiencia
La diferencia de consumo entre un híbrido como el Corolla y un naftero tradicional puede representar un ahorro considerable a lo largo del año, especialmente para quienes recorren muchos kilómetros en ciudad.