El sector industrial argentino atraviesa momentos complejos y ahora la noticia llega desde Campana: una planta de motos del Grupo Simpa cerró sus puertas, dejando a 50 trabajadores sin empleo de manera repentina. La decisión, que generó un fuerte reclamo sindical, forma parte de un plan de reestructuración de la compañía, que concentra la producción en Pilar.
El cierre que sorprendió a los trabajadores
El Grupo Simpa, representante en Argentina de marcas internacionales de motos como KTM, Royal Enfield, Harley-Davidson y CFMoto, informó que la medida busca “asegurar la continuidad de los procesos productivos y la competitividad”. Sin embargo, la noticia tomó por sorpresa a los operarios, que denunciaron haber sido despedidos sin previo aviso.
La Unión Obrera Metalúrgica (UOM) calificó el episodio como “bochornoso” y advirtió que 50 familias quedaron sin sustento de un día para el otro. A modo de protesta, los trabajadores realizaron manifestaciones exigiendo la reincorporación y reclamaron instancias de diálogo con la empresa para buscar alternativas a los despidos.
El argumento de la empresa
Desde la compañía explicaron que la decisión responde a un cambio en la estrategia productiva y a la necesidad de centralizar el armado de unidades en la planta de Pilar. Según informaron, esta medida permitirá mejorar la eficiencia, garantizar la atención a los clientes y potenciar las exportaciones.
Además, señalaron que uno de sus socios internacionales resolvió que ciertos modelos se fabriquen únicamente en sus plantas de origen, lo que obligó a Simpa a discontinuar la actividad en Campana.
El impacto en la industria y el empleo
El cierre de esta fábrica se da en un escenario delicado para el empleo industrial argentino. Según datos oficiales del Ministerio de Capital Humano, en junio se perdieron 12.000 empleos privados registrados, una cifra que refleja la presión que atraviesa el sector manufacturero.
La industria de las motos, que venía mostrando dinamismo con nuevos lanzamientos y propuestas de marcas nacionales e internacionales, ahora se enfrenta a un golpe inesperado en su cadena productiva.