Audi se encuentra preparando para la temporada 2016 del Campeonato del Mundo FIA de Resistencia (WEC) y las 24 Horas de Le Mans y por eso creó un completamente renovado R18 que casi no tiene nada en común con su predecesor. Y se trata nada menos que el auto de carrera más poderoso construido por la marca de los cuatro anillos.
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NOVEDADES
Cuenta con un concepto más radical en la aerodinámica, incluyendo una nueva célula de seguridad; su sistema de propulsión híbrido funciona por primera vez con una batería; el motor V6 TDI ha sido revisado y sumó nuevas soluciones técnicas que lo hacen más potente y eficiente que su antecesor, ya que consume menos combustible que cualquiera de las generaciones anteriores.
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EL MÁS POTENTE
La potencia total del nuevo Audi R18 es de más de 1.000 CV, entregada por el motor TDI y el sistema de propulsión híbrido. Cabe aclarar que el reglamento del FIA WEC promueve que los fabricantes construyan autos de carreras cada vez más eficientes y Audi se posiciona dentro de las mejores marcas en materia de eficiencia. A partir de la temporada 2016 este aspecto se intensificará, al reducirse considerablemente el límite superior de consumo de energía a 10 megajulios por vuelta en Le Mans.
NUEVA ESTRUCTURA MÁS AERODINÁMICA
Según la marca posee una “aerodinámica optimizada al máximo de forma tan consistente como los prototipos LMP1, que incluso ofrecen una imagen futurista”. Al mirar el nuevo Audi R18 salta a la vista un exterior significativamente diferente ya que las proporciones de la parte delantera y de la cabina en relación a la longitud total del vehículo han cambiado, y el frontal es claramente más estrecho que antes. Esto le otorga una mejor distribución del peso y la aerodinámica y la mejora del flujo de aire. Gracias a las nuevas proporciones, Audi ha desarrollado un nuevo monocasco, modificando las proporciones para alcanzar la longitud máxima de 4.650 milímetros, y su superficie se ha ampliado un 45 por ciento en comparación con los de la temporada 2015.
PROPULSIÓN HÍBRIDA
Recordamos que Audi fue el primer fabricante que ha ganado las 24 Horas de Le Mans con un sistema de recuperación de energía, utilizando un sistema de almacenamiento entre 2012 y 2015. Ahora una batería se encargará de la acumulación de la energía, y la tecnología electrocinética se sustituye por un sistema de almacenamiento electroquímico. A partir de la temporada 2016, la cantidad de energía aumentará en un 50 por ciento a 6 megajulios. Al comparar este nivel con el de la temporada 2014, desde entonces los ingenieros incluso han triplicado la cantidad de energía recuperada.
CÓMO FUNCIONA
La energía almacenada por el sistema es generada por la Unidad Generador Motor (MGU) situada en el eje delantero. El Audi R18 convierte el movimiento de rotación de las ruedas delanteras en energía eléctrica cuando el conductor frena antes de entrar en una curva, energía que se inyecta al sistema de almacenamiento. De esta manera, el prototipo híbrido utiliza la energía que de otro modo se iba a perder. Si el piloto acelera de nuevo al salir de la curva, la corriente fluye en dirección opuesta para alimentar la MGU. Como resultado, el eje delantero del R18 ayuda acelerar el auto de nuevo. Un circuito de refrigeración de baja temperatura, independiente desde el sistema de refrigeración del motor, enfría la batería, la MGU, y la electrónica de potencia.
MOTOR V6
El V6 TDI de 4 litros recibe bastante menos combustible, lo que reduce inicialmente su potencia aunque Audi compensó cambiando a una clase de híbrida de energía más alta. Con su único turbocompresor VTG de geometría variable y doble flujo, ángulo de inclinación entre bancadas de cilindros de 120 grados, colector de escape dentro de la V y soluciones detalladas e innovadoras, desde Audi celebran. El TDI V6 actual consume un 32,4 por ciento menos de combustible que la primera generación de 2011.
TECNOLOGÍA
Los faros Matrix LED combinados con los faros láser optimizan el haz de luz de los autos de carreras, que pueden alcanzar velocidades de hasta 340 km/h; se proporciona una buena visión trasera gracias a un sistema de cámaras en combinación con una ultramoderna pantalla AMOLED que ejerce como un espejo retrovisor digital. Finalmente la presión de inflado de neumáticos se controla mediante un sistema de monitorización de presión; y el Audi R18 controla automáticamente la distribución de fuerza de frenado con respecto al sistema híbrido en las diferentes condiciones de funcionamiento.
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