Camperas de cuero, motos modificadas y actitud 100% rock’n roll fueron los ingredientes de la película “Salvaje” (The wild one), estrenada en 1953 y protagonizada por Marlon Brando. El gobierno británico, atemorizado por la creciente moda de las motos modificadas y las bandas de moteros que se juntaban en los cafés londinenses, prohibió su difusión y le puso el sello de mito a todo lo que combinara esos ingredientes en el Reino Unido.
Esas motos, basadas en ejemplares de serie pero alivianadas todo lo posible y potenciadas en talleres improvisados, consolidaron todo un estilo y son uno de los iconos de la posguerra y la rebeldía juvenil de mitad del siglo XX. Eran las máquinas de los “corredores de café” o “Cafe racers” (así… sin acento) que apostaban a dar la vuelta a una “square” de Londres antes de que la Rockola del lugar terminara de reproducir el hit del momento.
Hoy, en pleno auge del «revival», la gran guerra está muy lejos, la rebeldía esta digitalizada y Marlon Brando quizás este recorriendo caminos del más allá con su moto. Pero las Cafe Racer siguen entre nosotros y cada vez deleitan más a los amantes de las dos ruedas.
Será por esto que Gilera Argentina decidió traer a nuestro país la nueva Gilera Cafe Racer Super Sport 200 cc, que gracias a Pueyrredón Motos podemos probar para todos los amigos de Cuyomotor en Mendoza.
¿QUE ES?
La Gilera Cafe Racer Super Sport 200 cc es una moto de cilindrada media baja, con excelentes prestaciones para el uso urbano y estética inspirada en las históricas motos Cafe Racer inglesas de la década del ‘50
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¿QUE MOTORIZACION TIENE?
La “cafetera” cuenta con un monocilíndrico de 200cc carburado, inspirado en los motores Suzuki-gn. Entrega una potencia máxima de 10.4 Kw a 8500 Rpm, casi unos 15 cv, que lleva a la rueda trasera mediante una caja de velocidades convencional de 5 marchas. Tiene un tanque de combustible de 11 litros, encendido tipo cdi y arranque eléctrico.
¿QUE CARACTERISTICAS TIENE LA PARTE CICLO?
Después de la estética, esta quizás sea la parte más destacada de la Gilera, ya que viene equipada con horquilla invertida, frenos a disco en ambas ruedas y chasis tipo cuna de acero, que le dan una excelente maniobrabilidad y respuesta sobre todo en curvas y recovecos de la citadinos. Ambas ruedas son rodado 17”, como exige el estilo, y están provistas de cubiertas con muy buen ancho: 110mm para el delantero y 130 mm para el trasero.
¿QUE DESTACA SU DISEÑO?
La respuesta es fácil: TODO. Toda la estética de la moto está muy cuidada y es muy atractiva para los amantes de las motos con estilo retro. Si bien algunos puntos no cumplen con los preceptos de una Cafe Racer, como los espejos o el portapatente que en ambos casos fueron incluidos por cuestiones vinculadas a la homologación, la moto está muy bien lograda. Tanque a dos colores con franja central y forma de gota, asiento bajo y plano rematado en el clásico colín redondo, un velocímetro e instrumental que brinda buena información pero mantiene el estilo clásico, llantas de rayos pintadas de negro y manubrio bajo. Un Cafe Racer que deja algunas posibilidades de personalización a su dueño como un cambio de espejos.
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¿CÓMO ES MANEJARLA?
La conducción resulta agradable y divertida. Los puntos más negativos son la dureza del asiento que sumada a la dureza de la suspensión trasera nos dejan sentir los detalles del asfalto, y algunas vibraciones que transmite el motor cuando llega cerca de su régimen máximo, y el muy poco espacio para transportar pasajero a pesar de que tiene los respectivos apoya pies. El resto es puro placer.
La moto frena y dobla con mucha precisión, se inmiscuye ágilmente entre los autos de la ciudad y acelera como una buena deportiva de cilindrada baja. La suspensión invertida es un gran acierto a la hora de hacer confiable el tacto en giros y frenadas rápidas. Es realmente divertida y maniobrable. Nuestro GPS nos marcó en ruta una velocidad máxima de 118 km, aunque el terreno ideal para esta moto es la pura ciudad. La postura de manejo es casi deportiva pero cómoda, sin necesidad de recostarse sobre el tanque.
La Gilera Cafe Racer 200 es una excelente opción para aquellos que quieren divertirse manejando con estilo y sin gastar demasiado, ya que 0km cuesta unos $39.000 puesta en calle y lista para rodar. No seremos Marlon Brando cuando la manejemos, pero sí podremos disfrutar de una buena moto y de un estilo histórico de diseño y quién sabe… Quizás hasta encontremos alguna que otra aventura manejándola, al mejor estilo “Salvaje”.
¿DONDE LA CONSIGO EN MENDOZA? PUEYRREDÓN MOTOS
Test Drive: Beto Sabatini
Fotos: DW