A fines de la década del setenta Citroën Argentina debió vender su paquete accionario debido a la crisis que afectaba al la industria local. El mítico 3CV que era producido en Argentina desde desde 1960 (en realidad inicialmente bajo la nomenclatura 2CV) continuaba a la venta, y era uno de los autos más económicos de nuestro mercado. En 1983, IES llegó para continuar la hegemonía.
Previo a eso, Citroën Argentina llegó a planificar la producción del mediano GS, que hubiera estado acompañado por los modelos más modernos de la firma. Pero la crisis le dio paso a una empresa casi quebrada, y fue prácticamente liquidada a un industrial argentino, Eduardo Sal-Lari. Con su conducción, en 1980, la gama Citroën se amplió con la introducción de modelos importados, como el Visa, o el CX o el mismo GS.
Este empresario, dueño de la firma Daher Boge que producía amortiguadores para Citroën, optó por continuar con la producción del 3CV. Inicialmente bajo la marca Citroën empleando piezas sobrantes, pero en 1983 debió alterar el nombre de su marca, algo que la firma francesa exigió ante la ley. Así nació IES: Industrias Eduardo Sal-Lari.
IES ¿La última marca Argentina?
El primer producto fue el IES 3CV, un modelo que estéticamente poco difería con el modelo de Citroën, más allá de pequeñas alteraciones estéticas. Rápidamente se posicionó como el auto más barato de Argentina, y la firma comenzó a expandirse por todo el país, brindando facilidades para la compra de su modelo. Asimismo la firma comenzó a desarrollar nuevas soluciones, siempre sobre la misma base.
En 1986 se presentó el IES América, una pasada en limpio del 3CV, que presentaba un nuevo diseño exterior, con ópticas frontales cuadradas, paragolpes plásticos y un nuevo panel de cola integrado. Hasta ese entonces, no ofrecía cambio mecánico alguno con respecto al 3CV original.
Sin embargo en 1987 apareció una evolución considerable, denominada como IES América Súper. En este caso, si bien no ofrecía mejoras estéticas más allá de un parabrisas más amplio, disponía de un nuevo chasis, con nueva suspensión a elásticos en las cuatro ruedas, discos de frenos delanteros y selector de cambios al piso. Además disponía de un renovado estilo interior, e incluso sistema de arranque mediante tarjeta magnética, que por entonces, funcionaba como método antirrobo.
Los desarrollos locales de IES a partir del Citroën 3CV
Paralelamente a eso, IES continuó desarrollando nuevos modelos, entre ellos la pick-up Gringa, partiendo de la base del nuevo chasis del América Súper. Se trataba de una pick-up con estilo completamente renovado y carrocería íntegramente en plástico.
En 1989 se presentó de manera oficial el Gringo, una versión semejante pero con formato todo-terreno y tracción 4×4. Para ese entonces, IES había inaugurado una nueva planta en la localidad bonaerense de Mercedes. Sin embargo, una nueva crisis sentenció la vida de la marca, que en 1990 dejó de producir automóviles. Para muchos, fue el último intento de tener una marca Argentina.
Actualmente los IES son difíciles de ver. De todos modos, tanto los América como Amérca Súper son los más populares, pero a la vez los más buscados debido a su diseño poco convencional, que los separa del Citroën original. Incluso se importaron algunos ejemplares a coleccionistas de otros países. Los precios actuales, pueden rondar entre 2.000 y 3.000 dólares.