Durante este mismo año el Fiat 128 está celebrando 50 años desde que comenzó a producirse en Argentina. En aquel momento Fiat Concord comenzó a producirlo, en cierta forma, para posicionarlo por encima del exitoso, aunque pequeño, 600, El 128 estaba basado en una nueva plataforma, que había sido estrenada en Europa poco tiempo antes, en 1969.
Se trataba de una base completamente revolucionaria para un auto del segmento medio. El concepto familiar estaba dado en una carrocería tricuerpo, con un habitáculo amplio de cuatro puertas, y motor en posición transversal, algo nunca antes visto en Argentina hasta entonces, y que priorizaba a la habitabilidad por sobre todas las cosas.
Aquella disposición de la mecánica, hoy la normal para todo auto de gama baja y media, plateaba una nueva idea y tecnología. El motor era quizás lo más llamativo del 128, debido a que el 1100 contaba con árbol de levas a la cabeza, y tapa de cilindros en aluminio. Además el comando de válvulas era mediante una correa de distribución de caucho. Prácticamente todo lo que un auto actual dispone, pero que para el momento era completamente novedoso.
Fiat 128: a 50 años de su debut en Argentina
Eso hizo que inicialmente el 128 sea resistido por muchos mecánicos, que desconfiaban de su fiabilidad. Sin embargo, en poco tiempo el sólido motor se hizo una buena fama por su elasticidad y resistencia. La mayor debilidad, sin embargo, pasaba por su estructura, principalmente del tren delantero y los anclajes de suspensión, que eran endebles.
Paralelamente, en 1973 apareció el motor 1300, que elevaba la potencia significativamente con respecto al 1100. El aprovechamiento de espacio era una de las claves de este auto, que innovó al montar la rueda de auxilio dentro del vano motor, para otorgar más espacio al sector de carga.
A través del tiempo el 128 ganó algunos ligeros rediseños, y en 1979 uno de los más grandes cambios estéticos al incorporar un nuevo diseño frontal, y un panel trasero renovado, bajo la denominación 128 Europa. De todas formas la clave del 128 estuvo en las versiones equipadas por IAVA, la gama «picante» del pequeño sedán que se ganó el mote de vehículo ideal para el público joven (ver nota).
Súper Europa: La última versión del Fiat 128
Ya en 1983 Sevel Argentina lanzó al mercado una nueva evolución, que bajo la denominación 128 Súper Europa agregaba detalles en plástico gris, como reemplazo a muchos de los cromados. También se renovó por completo el panel interior, otorgando una sensación de mayor modernidad, e incluyó un picante motor 1.5 como opción.
En producción hasta 1990, el 128 Súper Europa se posicionó desde 1988 como la alternativa económica al por entonces revolucionario Duna. Eso no hizo más que opacar el buen rendimiento en ventas del pequeño sedán de entrada durante sus últimos años de vida.
En la actualidad el Fiat 128 en sus versiones convencionales es buscado por el público general que gusta de un auto con cierto renombre, pero a su vez con un precio no demasiado alto. Las variantes más costosas son las de inicios de los setenta, aunque todo depende mucho del estado de originalidad y conservación. Los precios pueden variar desde 2000 a 5000 dólares.
