Hace pocos meses habíamos probado en Mendoza el Jeep Renegade en lo que es su versión de entrada, es decir el «Sport», que ya de por sí viene bien equipado y con muy buena nota en materia de seguridad. Ahora pudimos volver a testear en la provincia, esta vez en terrenos del Valle de Uco, la versión «Sport Plus», pero además en su opción con caja automática de 6 velocidades.
El ADN y la esencia no cambia. Habíamos aseverado que nos había gustado el Sport, por sus prestaciones, materiales y en general por su excelente relación precio-producto en el segmento que se mueve -el de los crossover compactos-, con rivales como Renault Duster, Ford Ecosport y Chevrolet Tracker y hasta Honda HRV, aunque siempre dependiendo de las versiones que se compare.
En la mayoría de los aspectos, esta versión más equipada de Renegade toma como base la ya testeada «Sport», te invitamos en ver el informe y galería de fotos de esa prueba AQUÍ. En este nuevo análisis te contamos las diferencias principales y qué suma este crossover que se ubica casi en lo más alto de las opciones del ejemplar brasileño, sólo superado por el «Longitude» 2.4 4×4.
¿QUIEN Y QUÉ ES?
Se trata de la variable que Jeep lanzó al mercado en abril, con transmisión automática de 6 velocidades. Conserva el motor 1.8 litros de 130 CV, que ya estaba disponible en versiones Sport y Sport Plus con transmisión manual de cinco velocidades. Esta nueva variante cuenta con el nivel de equipamiento Sport Plus y también se produce en la planta de Pernambuco, Brasil.
Ofrece una moderna gestión electrónica, que le permite al conductor disponer de varios modos de usos, junto a una función adaptativa que se acomoda a su estilo de conducción, permitiendo cambios más rápidos, al menor contacto sobre el pedal del acelerador.
Sobre su potencia citamos lo que señalábamos en el test anterior: «Pese a este punto en el que alguno puede sentir que le faltan unos caballos, hay que reconocer fuertes en la dirección, las suspensiones y la sensación de robustez que nos transmite y lo dejan bien parado como un SUV equilibrado».
La transmisión que utiliza es del tipo convencional, con convertidor de par. Por tanto, al no disponer de discos de embrague sometidos a desgastes, ni complicados dispositivos electrohidráulicos para manipular el embrague y el selector del cambio, es fiable, suave y fácil de usar.
¿DÓNDE LO PROBAMOS?
Nuestra partida fue desde GENCO, concesionario oficial Jeep en Mendoza, ubicado en Rodríguez Peña 401 de Godoy Cruz. Allí nos subimos a una de las unidades de test drive que también están disponibles para clientes -versiones Sport y Sport Plus- para continuar camino por las calles de la ciudad de Mendoza hasta nuestro punto fijo de encuentro y salida de test drive: el Hotel NH Cordillera.
Nos reunimos con algunos de nuestros lectores en el café del Hotel NH, en calle España y Gutiérrez, recientemente abierta tras las obras de remodelación de Plaza San Martín. Allí compartimos algunas opiniones sobre el modelo y lo fotografiamos para partir a un tour por las calles de la ciudad, para después transitar por la Ruta 40 hacia el Valle de Uco. Una vez en el Manzano Histórico lo pusimos a prueba subiendo por el sinuoso camino de tierra y piedras, trepando hasta el Refugio Portinari, entre montañas y con una temperatura por debajo de los 5° bajo cero.
Teniendo en cuenta que no se trata de un 4×4, este ejemplar de Jeep cumple con las premisas que le podríamos exigir a un crossover para el uso diario y que bien se presta a salidas más aventureras, con buen despeje de suelo y valiéndose de las características Jeep.
En esta diversidad de terrenos es que pudimos probar la versatilidad de su caja automática y también en modo secuencial, pudiendo operarla desde las levas al volante o directamente desde la misma palanca de cambios, pasándola a modo secuencial. Para su desempeño en montaña, esta última modalidad que nos permite hacer rebajes (hasta cierto punto), nos pareció de mayor utilidad operarla desde la misma palanca y no desde la levas, que dan el perfil más deportivo.
Igualmente, como lo hemos advertido en otros automáticos, la opción secuencial es fundamental en los bruscos descensos montañosos, donde es clave frenar el vehículo con la caja de cambios y no abusar de los frenos; algo que pudimos utilizar sin problemas en este Renegade.
EQUIPAMIENTO Y TENOLOGIA
Con una dotación similar al del Renegade «Sport Plus» manual, la nueva variante automática se destaca por ofrecer siete airbags, control electrónico de estabilidad, anclajes ISOFIX para sillas infantiles, pantalla touch de 5” con navegador satelital, radio con Bluetooth, sensor de estacionamiento, pack eléctrico, control de velocidad crucero, llantas de aleación de 16 pulgadas y cámara de retroceso, entre otros dispositivos. Además de las barras de techo que no estaban disponible en el «Sport» que habíamos manejado y que realmente son un accesorio estético que le suman a la onda off road Jeep.
Como distintivos con la versión «Sport» del test anterior, suma las barras de techo, el volante en cuero, mejora sustancialmente el equipamiento en seguridad (siete airbags en vez de dos), cámara de retroceso y navegador , entre otros puntos.
Puntualmente en el factor tecnológico de la pantalla y navegador, seguramente en un futuro Jeep pueda transferirle mayor tecnología, ampliarlos y modernizarlos, ya que en el caso del GPS Tom Tom, por ejemplo, no incluye los mapas de algunas ciudades, como nos pasó en zonas de Tunuyán, y el sistema no es todo lo funcional que podríamos exigirle.
¿CONSUMO?
Como sabemos esto varía según el “pie” del conductor y los caminos por los que se transite. Nosotros hicimos un promedio entre la ciudad y ruta, que nos da unos 10.5 litros cada 100 Km aunque como señalamos esto puede variar más-menos en 1 litro (cada 100 km), no mucho más. Si el uso se limita a la ciudad vamos a notar mayor consumo. Es una media para el segmento de SUV en el que se mueve y que hemos podido probar en la sección Test Drive de Cuyomotor.
¿VERSIONES Y PRECIOS?
Renegade Sport Plus AT:$502.814
La garantía es de 3 años o 100.000 km, prevaleciendo la condición que ocurra primero.
¿CONCLUSIONES?
En general las conclusiones son muy similares al test a la versión «Sport» mencionada. Suma equipamiento ya desde la configuración «Sport Plus manual» (este tiene un precio promedio 10% menor al automático). La pregunta es si se justifica la caja automática. Y aquí habrá un tema de subjetividad del gusto del conductor y del mix de uso (Más ciudad, ruta o aventura). Beneficios de reducción de consumo realmente no notamos e incluso en ciudad obtuvimos un promedio algo por encima de la misma prueba en manual. Insistimos en que, aún faltando algunas actualizaciones que seguramente llegarán próximamente, entre los SUV del segmento en competencia, el Renegade es un modelo de gran relación precio producto y especialmente calidad.
JEEP EN MENDOZA
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