La libertad de aprender a conducir gracias a los instructores particulares de manejo
Si estás deseando poder moverte con libertad y sin depender del transporte público, es momento de aprender a manejar. Los instructores de manejo particulares serán tus grandes aliados en esta aventura sobre ruedas.
Hay personas que pasan años deseando cumplir la mayoría de edad para sacar el carnet de conducir y el mismo día de su cumpleaños ya están rindiendo el examen. Pero, esa no es la experiencia de todos. También están quienes, por diferentes circunstancias, no han aprendido a manejar y lo han postergado a lo largo del tiempo.
Sin embargo, nunca es demasiado tarde para aprender a manejar y menos si lo hacés con un instructor de manejo que se adapte a tu situación particular.
Este aprendizaje tan personalizado pone fin a todas las excusas y aleja todos tus miedos. Es momento de abrocharse el cinturón y poner los motores en marcha.
¿Por qué es importante aprender a manejar?
Si bien generalmente hay alternativas para transportarse, como puede ser la bicicleta, colectivo, subte o el auto de un amigo, nada te da la libertad que te ofrece saber conducir.
Cuando sabes manejar, sos vos el que decide: cuándo salir, hacia dónde, qué ruta tomar y qué velocidad alcanzar.
Ya no dependés de nada ni nadie para llegar a destino.
¡Libertad absoluta!
Y no solo podrás manejar para hacer viajes de placer o transportarte a tu trabajo. También, te da la tranquilidad de que ante cualquier emergencia vas a poder pedir ayuda rápidamente gracias a las facilidades de trasladarte en auto.
Otro beneficio de aprender a conducir es la mejora en tu sentido de la ubicación. Cuando manejamos tenemos que estar completamente atentos al entorno. Un mal movimiento puede generar un accidente y, por ende, todos nuestros sentidos deben estar concentrados en lo que sucede fuera del auto. Gracias a esta atención plena mejorarás tu orientación.
Cuando manejás estás obligado a saber el nombre de las calles, la dirección, la ubicación de cada barrio, dónde está el norte y el sur, etc. ¡Llegar a destino depende exclusivamente de vos!
Si bien es una gran presión, también es una oportunidad de conocer como la palma de tu mano los sitios por donde te movés.
¿Sabías qué saber conducir también amplía tus horizontes laborales?
¡Sí! En muchos empleos te exigen tener auto para poder acceder al centro de trabajo, si es que se encuentra en un lugar recóndito o donde no llegue el transporte público.
Por otro lado, hay ofertas de trabajo (transportistas, vendedores, repartidores, visitadores médicos, etc.) en las que tener carnet de conducir es un requisito excluyente.
Y el mejor beneficio de trasladarse en auto es la comodidad de viajar escuchando tu propia música, con aire acondicionado o calefacción y sin esperar largos minutos a que pase el bondi o subte.
Con tantas ventajas no hay razones por las que negarse a tener carnet de conducir.
¿Con ganas de sentir la libertad de moverte sin límites? ¡Aprendé a manejar!
¿Cómo es una clase con un instructor de manejo?
Un instructor de manejo es una persona que te acompaña en este largo proceso que es aprender a conducir. Porque hay que ser sinceros, uno no se convierte en un conductor de Fórmula 1 en el primer intento. Lleva mucha paciencia y horas de práctica.
El instructor de manejo te motivará a seguir adelante incluso cuando quieras abandonar esta aventura y volver a usar una bicicleta. ¡No te permitirá bajar los brazos!
Él o ella te enseñará desde los conocimientos más básicos, como poner los cambios, hasta los más complejos.
Y para aquellos alumnos que saben manejar, pero tienen ciertas dificultades para estacionar o conducir en ruta, el instructor también será su gran aliado. Te enseñará maniobras de experto para conducir sin riesgos.
Si bien es importante conocer la teoría sobre las leyes de tránsito, lo fundamental es practicar. Cuantas más horas de práctica, mejor rendimiento.
Y si esas horas de práctica son con un instructor en el asiento de acompañante, te sentirás más seguro y perderás todo tipo de miedo.
¿Es mejor aprender en una escuela de manejo o con un instructor particular?
Muchas personas deciden aprender a manejar con un familiar o amigo. El principal problema de esta decisión es que no todos los conductores tienen una cultura vial adecuada. Es probable que durante su experiencia manejando hayan adquirido malos vicios que luego te transmitan a vos.
En cambio, si aprendés con un instructor o en una escuela de manejo, garantizás un excelente nivel de parte de los profesores.
Pero, la forma más segura de aprender a conducir es con un instructor particular de manejo.
Tomar clases con un instructor de manejo particular te garantiza un aprendizaje personalizado donde el profesional se adaptará a tu ritmo.
¡Podés hacer cuantas preguntas necesites porque él hará la clase exclusivamente para vos!
Muchos alumnos suelen postergar sacar el carnet porque les genera nervios y ansiedad este proceso. Pero, si hacés una formación completa con un instructor, te sentirás acompañado durante el aprendizaje y tomarás la confianza necesaria para enfrentar el examen.
Mientras que en las escuelas los profesores pueden cambiar de una clase a la otra, con las clases particulares siempre aprenderás con el mismo instructor. Generarás un vínculo y una confianza esencial para perder el miedo al volante.
Cuando conducimos es normal ponernos nerviosos, sobre todo si somos principiantes, pero el instructor se encargará de transmitirte la templanza necesaria para progresar en tus conocimientos de conducción.
Además, te enseñarán todo el contenido teórico para que apruebes el examen en el primer intento y consigas tu carnet de conducir.
Y si en tu caso ya tenés la licencia, pero querés tomar unas clases de refuerzo, podés tomar unas clases para sentirte más confiado al momento de salir a la ruta.
También están aquellos alumnos que viven en ciudades grandes como Buenos Aires donde manejar es todo un desafío y las clases con un instructor les ayudan a mejorar su rendimiento conduciendo.