Con Cuyomotor realizamos una nueva prueba, pero esta vez no a un vehículo cero kilómetro, sino que nos subimos a un usado y nos fuimos a testear cómo es el trámite en primera persona para realizar la tan mentada RTO (Revisión Técnica Obligatoria) en Mendoza, la cual ya rige desde este año, para vehículos 2018 para atrás.
El objetivo de nuestra prueba era determinar cómo es la atención, qué es lo que controlan, cuánto cuesta el trámite y qué tanto nos podemos tardar para salir con el aprobado (oblea y certificado), siempre y cuando nuestro vehículo esté en condiciones y pase las etapas de inspección en su estado general.
Para obtener el turno hay que ingresar a la web de la RTO (ver) y nos guiará pasó a paso con los datos del vehículo, los nuestros y hasta el final donde se puede elegir por zona entre los talleres habilitados. Luego nos llegará un mail de confirmación. Además hay un video explicativo para ver paso a paso los campos que deberemos completar.
Para nuestra experiencia solicitamos turno en uno de los talleres debidamente habilitados en Mendoza, en este caso se trata de Revitotal Mendoza SA que acababa de estrenar sus nuevas instalaciones en Maipú – Mallea S/N entre Alsina y Dorrego General Gutiérrez -. Nos tocó uno de los gélidos días de junio, pero por suerte y adelantándonos a la conclusión, tardamos menos de lo que pensábamos para seguir con nuestras actividades.
Video del test a la RTO
Comenzando el proceso
Llegamos en nuestra unidad de prueba, un Fiat Siena del año 2015, cerca de las 12 del mediodía de un jueves al taller ubicado en calle Alsina de Maipú, el cual ubicamos mediante Google Maps sin problemas. Ingresamos al predio, estacionamos y entramos a las oficinas para presentar los papeles, pagar y comenzar las pruebas, a cargo de técnicos y un ingeniero, equipados con indumentaria según los protocolos COVID-19.
La documentación requerida para la RTO es: constancia de Cobertura de Seguro Obligatorio, Licencia de Conducir Vigente del Solicitante, Cédula Verde o Azul y DNI. Mientras que para vehículos con GNC piden la habilitación del Equipo de Gas. Ya conocíamos lo necesario ya que antes de la visita habíamos chequeado en la web oficial, donde además se puede conocer punto por punto todo lo indispensable para el trámite.
En nuestro caso que fuimos con un auto, cuya tasa es de $2395, se paga por única vez y dura todo un año. Esto nos asegura que nuestro vehículo está en condiciones de seguridad para circular. Pero si fuéramos en moto, por ejemplo pagaríamos $905 (menos a 300cc) o $1650 (mayor a 300 cc). Mientras que para las camionetas el valor es de $2660. En la caja de este taller de RTO como medios de pago aceptan efectivo, tarjeta de débito y crédito, la billetera virtual Yacaré y próximamente Mercado Pago según nos dijeron.
Con el primer paso cumplido, enseguida nos subimos al auto, ingresamos al enorme taller que luce reluciente y con instrumental que iremos conociendo a medida que pasemos, como bautizamos nosotros, por las diferentes “estaciones” o “islas” de control.
En general serán supervisados sistemas como los de frenado, dirección, suspensión, transmisión, rodamiento y de iluminación. También revisarán el nivel de intensidad sonora, silenciador, sistema de escape, emisión de contaminantes, gases de escape y pérdidas de fluidos. Es decir que se verá el estado general de vehículo y carrocería, donde también entran elementos salientes o cortantes, deterioros, guardabarros, paragolpes, defensas reglamentarias, altura, puertas, capot y baúl, entre muchos otros.
Al final a la vez serán chequeados los accesorios de seguridad y elementos para emergencia tales como cinturones de seguridad, apoya cabezas, extintores o matafuegos (ojo con esto y revisar que no esté vencido y que esté con carga), balizas triángulo reflactante, chaleco refractario y botiquín de primeros auxilios.
Paso a paso por las estaciones
En el primer sector llegamos con nuestro auto donde revisarán aspectos del tren delantero, especialmente harán hincapié en que la suspensión y la alineación sean las correctas, lo cual se revisa mediante un equipo específico. Sólo tenemos que seguir las indicaciones del técnico para asistirlo moviendo el volante y la máquina arrojará el resultado que conoceremos al final de la línea de revisión. Esto dura apenas unos minutos y estamos listos para el siguiente paso.
Ahora ingresamos tal vez al área más difícil e importante para nuestra seguridad y la de terceros: el “Frenómetro”. Aquí se tendrá en cuenta el estado general del sistema de frenado y si este está en condiciones óptimas. Y aquí es donde muchos vehículos quedan condicionados como resultado final. Lo bueno es que es una advertencia que por ahí no conocíamos y no alerta que debemos llevar el auto a reparar algún aspecto del sistema de frenado. En la misma isla pasará por el verificador de gases.
Finalmente el stop es para ser revisado por un técnico desde la fosa, para supervisar la parte inferior y detectar elementos sueltos que puedan resultar peligrosos. De allí llevamos el auto a una playa exterior, donde nos pedirán los elementos de seguridad, como matafuegos y balizas triangulo, entre otros.
Tres posibles resultados
A esta altura la RTO puede arrojar los siguientes resultados: aprobado, condicionado o rechazado.
• Aprobado: En este caso el vehículo no presenta deficiencias o las mismas no inciden sobre los aspectos de seguridad para circular en la vía pública. Será válido para circular por el periodo de un año.
• Condicionado: En este caso denota deficiencias que exigen una nueva inspección, será válido para circular solo por sesenta días hábiles inmediatos a su emisión. Este certificado será emitido por una sola vez y deberá consignar la fecha límite para efectuar la nueva verificación. Vencida la fecha límite no podrá emitirse otro certificado “condicionado” y se considerará automáticamente a dicho certificado como “rechazado”, sin necesidad de declaración alguna por parte del Centro de Revisión Técnica. La nueva verificación abarcará solo las partes que fueron rechazadas.
• Rechazado: En este caso no se permitirá que el vehículo circule por ofrecer riesgos a transportados y/o terceros. El certificado deberá consignar expresamente que el vehículo no se encuentra autorizado para circular en la vía pública. El vehículo deberá ser retirado del Centro de Revisión Técnica en un remolque contratado por el usuario.
Conclusión
En nuestra experiencia particular y dado el contexto en el que lo hicimos, el trámite resultó verdaderamente muy ágil. Llegamos cerca del mediodía, un horario más tranquilo al parecer que otros. Chequeamos previamente contar con los papeles en regla y también con un vehículo que sabíamos en principios que estaba en condiciones, ya que lo verificamos periódicamente y en el caso del matafuego lo hicimos cargar para la ocasión porque notamos que le faltaba. Claro que siempre puede ser que se detecte algo que para nosotros es imperceptible o se nos puede pasar por alto. Si se trata de un punto del tren delantero o frenos, nos estarán dando una advertencia para poder solucionarlo en lo inmediato.
En nuestro caso nos salió con aprobado y durante un año tenemos la oblea en el parabrisas y un certificado por si lo exigen en un control. Pero lo más importante es que nos vamos tranquilos de que el vehículo pasó un control exhaustivo, que de otra manera la mayoría nunca realizaríamos. Se trata de un tema de seguridad vial que hay que realizar este año para estar tranquilos y además evitar posteriores multas.
Coordenadas:
- Todos los datos y preguntas frecuentes sobre la RTO en la web oficial (ver)
- El taller donde hicimos la experiencia: Revitotal SA, en Maipú o Las Heras (ver)