Lucid es una de las marcas eléctricas más interesantes del hemisferio norte, luego de Tesla, claro está. Con su sedán denominado Air, la marca Lucid ha sorprendido no sólo desde su punto de vista dinámico sino también desde su ingeniería, pero tener un portfolio de tan sólo una silueta queda corto en un mercado como el actual, por eso se hacía urgente para la empresa ofrecer un nuevo producto.
El nuevo producto en cuestión llegó como un SUV de tres filas de asientos denominado Gravity, aunque podríamos decir que su silueta se asemeja más a un station wagon, ya que es notablemente más bajo que el típico SUV de tres filas.
El Lucid Gravity se propone como un vehículo familiar racional, con más espacio y versatilidad que lo que suele verse en la oferta actual de vehículos eléctricos premium, sin llegar al tamaño exterior típico de los SUV de tres filas.
Si seguimos hablando de su interior, la mencionada tercera fila es amplia y la segunda fila es deslizante, permitiendo además plegarla completamente junto a la tercer fila y lograr un espacio de carga impresionante, al punto que se puede llevar una tabla de surf dentro del vehículo. Por si fuera poco, en la parte delantera el capó también es un espacio de carga, pero también puede convertirse en un sitio de descanso mediante un sillón plegable.
En materia tecnológica, el interior del Lucid Gravity sorprende con una enorme pantalla OLED curva de 34 pulgadas sensible al tacto, segmentada internamente para ser instrumental y equipo multimedia. Justo debajo, en posición sentral, se complementa con otra pantalla de 12,6 pulgadas que tiene controles físicos para controlar el acondicionador y el volumen del sistema de audio.
Si vamos al puesto de conductor tenemos un volante con la base y parte superior planas, un formato que en inglés se denomina squircle, haciendo un juego de palabras que combina cuadrado (square) con círculo (circle). Este particular volante tiene paneles táctiles para controlar el panel de instrumentos y las pantallas de información y entretenimiento, con una funcionalidad de deslizamiento para facilitar la navegación.
Lucid Gravity, su mecánica
El Lucid Gravity cuenta prácticamente con la misma configuración que el sedán Air, lo que es una buena noticia. Estos vehículos comparten plataforma, batería y motores, por lo que tenemos potencias que rondan los 900 HP (según la versión) y una autonomía destacada, que supera los 700 Km.
La recarga de la batería debería ser tan excepcional como la del Air, que con su arquitectura de 900 voltios que permite una recarga teórica de 300 Km en unos 15 minutos, y decimos teórica porque sólo puede lograrse con un cargador especial y a máxima potencia, algo que no siempre tendrás disponible.
Siguiendo en lo mecánico, ofrece como opción un sistema de suspensión neumático que se ajusta automáticamente en altura según el modo de conducción. También se puede ajustar manualmente si se hace off-road. Al igual que el Air, el Gravity tiene control de amortiguación semiactivo, pero a diferencia del Air, ofrece la opción de dirección en las ruedas traseras.
El Lucid Gravity llegará a los Estados Unidos para finales de 2024, poco después de cuando comience su producción. Según la marca, el precio inicial será de menos de USD 80.000, lo que, de ser así, lo convertirá en un participante muy interesante en su exclusivo segmento.